10 de Septiembre
Conocemos a
Sarmiento
Considerado el “padre
del aula”, y quien logró llegar a la Presidencia de la Nación entre
1868-1874, Sarmiento fue el gran propagandista de la necesidad de una ley
educativa argentina. Muchas de sus ideas se recopilaron en su
texto De la educación popular (1849). Sin embargo, durante su mandato,
no llegó a sancionar ninguna. Hubo que esperar hasta el gobierno de Roca,
cuando se aprobó la Ley N.° 1420 de educación universal, obligatoria, gratuita
y laica, podría decirse que en esta ley se plasmaron las convicciones sarmientinas acerca de la
educación que debían recibir los argentinos.
Aquí te presentamos el
libro Educación Común en
el Estado de Buenos Aires donde Sarmiento hace una descripción de la
provincia de Buenos Aires, sus recursos y la falta de aprovechamiento de éstos
para un progreso notable. Propone entonces ideas para el crecimiento económico y social a
partir de la educación.
Libro disponible en la Biblioteca Escolar “Wolf
Schcolnik”
Para conocer algunos acontecimientos que tal vez
nunca lo escuchaste o leíste, te dejamos el siguiente enlace…
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Podrás
descubrir el verdadero nombre de Sarmiento (no se llamaba Domingo) y también por qué no tenía el apellido Quiroga.
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¿Cómo
fue su escolaridad, quiénes le enseñaron y cómo aprendió?
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¿Cuántos
hijos tuvo (¿Dominguito lo era?) y ¿cómo
conoció a su esposa?
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¿Qué
cultivos trajo al país por primera vez?
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Como
Gobernador de San Juan, ¿cuál fue su gestión?
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¿Cómo
fomentó las Bibliotecas Populares?
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¿Para
qué organizó el primer censo nacional en 1969?
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¿De
qué manera introdujo los primeros estudios de meteorología en el país?
También te invitamos a que
ingreses al Museo Casa Natal de Sarmiento en la provincia de San Juan, allí se
recreó la huerta familiar tal como Sarmiento la describió en su libro
“Recuerdos de Provincia”.
…“En el resto de sitio que quedaba de veinte varas
escasas de fondo, tenían lugar otros recursos industriales. Tres naranjos
daban fruto en el otoño, sombra en todos tiempos; bajo un durazno corpulento,
había un pequeño pozo de agua para el solaz de tres o cuatro patos, que
multiplicándose, daban su contribución al complicado y diminuto sistema
de rentas sobre que reposaba la existencia de la familia; y como todos
estos medios eran aún insuficientes, rodeado de cerco, para ponerlo a
cubierto de la voracidad de los pollos, había un jardín de hortalizas,
del tamaño de un escapulario, y que producía cuantas legumbres entran en la
cocina americana, el todo, abrillantado e iluminado con grupos de flores
comunes, un rosal morado y varios otros arbustillos florecientes”.
En este
sitio también podrás hacer un recorrido por la galería de fotografías del
Museo.
https://casanatalsarmiento.cultura.gob.ar/exhibicion/patio-de-la-huerta/